Una guía para comprar con sensatez y no frenéticamente
¿Por qué la gente va de compras? La explicación racional sería «porque necesitan algo», pero si eso fuera cierto, la mitad de los problemas del mundo actual con el endeudamiento y el gasto excesivo no se producirían. La gente no siempre tiene la culpa de esto. Para empezar, la publicidad y el marketing suelen estar orientados a hacer que el consumidor compre algo que, o bien no conocía previamente, o bien no tenía intención de comprar en primer lugar. El objetivo de este breve artículo es ayudarle a ganar en tranquilidad financiera aprovechando su poder adquisitivo para lo esencial y lo deseable en lugar de las frivolidades. Nadie quiere quitarle la diversión a su vida, pero piense cuánto más divertido sería estar totalmente libre de deudas.
Primer consejo: cree un plan mensual
Establece la norma de que no puedes comprar nada nuevo hasta que haya transcurrido un mes natural, exceptuando la comida, la bebida y otras necesidades. Coloca una lista en la cocina y ponle fecha a cada posible compra. Si dentro de un mes todavía lo quieres y tienes el dinero, puedes comprarlo. Lo más probable es que ya no te interese.
Segundo consejo: evitar los centros comerciales
Alguna vez has pensado: «Hoy estoy un poco aburrido, voy a ir al centro comercial a mirar escaparates». Ahora bien, rara vez vas a mirar escaparates para comprar lo esencial; vas (te des cuenta o no) para dejarte tentar. Así que en lugar de quedar con tus amigos en la cafetería o en la hamburguesería, invítalos a casa. El café será igual de bueno y mucho más barato.
Tercer consejo: Compra de alimentos en línea
Esta es una forma maravillosa de evitar la tentación. Lo más probable es que tengas una lista de la compra habitual en el supermercado para tus comestibles, etc. Haz una lista y luego entra en tu tienda favorita y haz tu pedido. Así evitarás los expositores de los puntos de venta y el despliegue de caramelos y chocolates y otras compras impulsivas en la caja, por no hablar de los halagos del personal que te invita a probar la última oferta especial.
Cuarto consejo: Navega con cuidado
Procure evitar los sitios de venta en línea porque son muy impulsivos. Si sientes que realmente debes tener algo, recuerda la regla de los 30 días de la que hablamos antes.
Consejo 5: Elija sus canales
Viviendo en Estados Unidos, es bastante difícil evitar la publicidad en la televisión, sea cual sea el programa que estés viendo. Pero, al menos, decídete a no pasar ni un momento por ninguno de los horribles canales de compras, porque casi puedes garantizar que todo lo que compres allí será puro impulso.
Consejo 6: Respire profundamente
Comprar por impulso y por encima de los límites es una forma de (perdón por decirlo así) adicción, para compensar quizás las decepciones o los problemas. Reconoce los síntomas, respira profundamente, bebe mucha agua, da un pequeño paseo. Todo ayuda.
Séptimo consejo: Racionalice su crédito
Intenta pagar tus tarjetas con una entrada de dinero y luego concéntrate en enderezarte. Los préstamos sobre el título del coche son una gran manera de hacerlo.