Cómo atacar una mala calificación crediticia
Muchos jóvenes se endeudan. Desgraciadamente, el mundo en el que vivimos ahora nos obliga a endeudarnos. En su mayor parte, es algo bueno, pero hay muchas oportunidades para que las cosas se salgan de control. Y, cuando lo hacen, el resultado suele ser un mal crédito.
Si las cosas han llegado a un punto en el que tienes mal crédito, entonces es vital que afrontes las cosas y tomes medidas tan pronto como puedas. La quiebra podría estar en camino, y eso no es algo a lo que ningún joven deba enfrentarse. Sin embargo, que no cunda el pánico; con mucha concentración y determinación, puedes empezar a reconstruir tus calificaciones crediticias de inmediato y empezar a darle la vuelta a tu situación. Puede ser un camino largo de recorrer, pero estos consejos pueden ayudarte a acercarte a donde quieres estar.
Comprobación de su informe de crédito
Lo primero que hay que hacer es comprobar su informe de crédito en una de las agencias de referencia de crédito (CRA). Equifax es una de las más importantes, y también están Call Credit y Experian. Asegúrate de comprobarlo en todas ellas, ya que cada empresa utiliza una agencia diferente. Incluso si no has contraído deudas, pueden producirse errores y actividades delictivas. Por eso, si ves algo sospechoso de lo que no crees que seas responsable, es importante que lo señales a la empresa de informes.
Si es responsable, es importante identificar qué es lo que está haciendo caer su puntuación. Busque cualquier pago o factura no efectuada de acreedores o proveedores de servicios y anótela. Hay que centrarse en ellos en primer lugar, ya que son los que están causando el daño. Sin embargo, no se olvide de ninguno de sus otros pagos regulares. Tendrá que mantenerlos al día, o acabarán anulando todo su buen trabajo.
Opciones de estilo de vida
Ahora que sabes dónde están tus problemas, es el momento de pensar en cómo aclarar las cosas. Probablemente tendrá que encontrar algún dinero extra de alguna parte para atacar las deudas correctas. Pero, al mismo tiempo, deberías estar al día con tus otros pagos, que incluyen la hipoteca, el alquiler, los servicios públicos, la comida y los gastos de subsistencia.
Haz un presupuesto y analiza en qué puedes reducir tus gastos: ¿gastas demasiado en salidas nocturnas? ¿Quizás puedas reducir la cantidad de ropa que compras cada mes?
Es importante ver esto como un cambio de estilo de vida y no como algo puntual. Los gastos excesivos te llevaron a esa situación en primer lugar, y no tiene mucho sentido volver a acumular crédito si sólo vas a acabar en la misma situación.
Pagar las deudas pendientes
Cuanto más rápido pague las deudas que están causando su mal crédito, más rápido reparará su puntuación. En la mayoría de las situaciones, debe evitar contraer más deudas para pagar una deuda antigua. Pero, si tiene cuidado, puede resultarle bien. Es posible que descubra que pedir un nuevo préstamo le resultará más barato a largo plazo, o que reducirá sus pagos mensuales a algo más asequible.
Sin embargo, tienes que hacer muchos deberes. Busca una calculadora de préstamos e introduce los datos para saber si la cantidad que vas a devolver al final merece la pena. En algunas circunstancias no lo será, así que evita estos préstamos. Debes buscar algo que puedas devolver en un plazo determinado. Asegúrate de que puedes hacer frente a todos esos reembolsos, o sólo estarás empeorando las cosas.
Obtener una nueva tarjeta de crédito
Puede parecer contrario a la intuición, pero obtener una tarjeta de crédito y devolver lo que se debe con regularidad es uno de los mejores métodos para reparar un mal historial de crédito. Sin embargo, puede ser un juego peligroso para los irresponsables.
En primer lugar, cada vez que solicita un crédito, éste queda registrado en su informe. Si se lo deniegan -por el motivo que sea-, puede restarle puntos a su puntuación. Las entidades crediticias le enviarán una carta en la que se exponen los motivos de la denegación. Puede que ni siquiera tenga que ver con su puntuación de crédito, así que no solicite nunca muchas tarjetas de crédito en una oleada de actividad. Si te la deniegan, deja pasar unos meses antes de volver a intentarlo.
En segundo lugar, una vez que se tiene un mal historial de crédito, los prestamistas tienden a cobrar un interés excesivo porque se le considera más arriesgado. Esto significa que si gastas una determinada cantidad cada mes en una tarjeta, pero no pagas toda la cantidad antes de la fecha de vencimiento, te añadirán los intereses. Rápidamente, te encontrarás con más deudas.
Pagar a tiempo
Asegúrate de devolver lo que has gastado cada mes, todos los meses. Por ejemplo, puedes pagar la compra mensual o semanal de alimentos con tu tarjeta de crédito y transferir el importe total a tu tarjeta en cuanto llegues a casa.
Tienes que convencer a los acreedores de que eres fiable con tu dinero. Y la única manera de hacerlo es pagando regularmente, así que no deje de pagar nunca y no sobrepase nunca su límite. De hecho, lo mejor es mantenerse dentro de su límite -alrededor de la cifra del 60%-, lo que dará a entender que es sensato con su dinero.
Lo que NO hay que hacer
Hay un montón de empresas por ahí que proclaman que pueden reparar su puntuación de crédito para usted. Naturalmente, todas ellas cobran mucho dinero por hacerlo, así que evítalas a toda costa. Sobre todo porque es probable que le sobre poco dinero. Sin embargo, si cree que no tiene otra opción, tenga en cuenta que nunca debe pagarles hasta que hayan hecho lo prometido.
Y ahí lo tienes. Con un poco de suerte, si has seguido estos consejos estarás en camino de reparar una mala puntuación de crédito. Asegúrate de estar al día con esos pagos y pronto verás cómo tu puntuación empieza a mejorar.