¿Es posible permitirse un buen coche a los 20 años?
Pagar un coche es un gasto enorme en cualquier momento de la vida. Lo es aún más cuando se está en la veintena. Financieramente, los años entre los 20 y los 30 son los más difíciles. Estás encontrando tus pies en tu carrera. Pierdes dinero en el alquiler y ahorras desesperadamente para el depósito de una casa. Además, los sueldos están en desacuerdo con el coste de la vida. Eso hace que sea aún más difícil para un veinteañero permitirse un coche.
Cuando eres joven, tu coche te da una sensación de libertad. Puede ayudarte a explorar y ampliar tus opciones profesionales. Un coche pequeño es un gran activo a los 20 años. Sin embargo, muchos se quedan sin los coches buenos. Esto nos lleva a la inevitable pregunta: ¿puedes permitirte un buen coche a los 20 años? Estoy seguro de que todos podríamos permitirnos un viejo cacharro destartalado. Sin embargo, nos exponemos a las averías y a los costes de mantenimiento.
¿Qué tipo de coche?
Lo más probable es que un coche de lujo, un todoterreno o una berlina estén fuera de tu alcance. Pero eso no significa que no puedas hacerte con un buen coche. Los utilitarios modernos son algunos de los mejores coches de la actualidad. Si no tienes un ejército de niños que cuidar, un pequeño utilitario para la ciudad debería ser el primero de tu lista. Deberías encontrar un buen equilibrio entre coste y fiabilidad.
Comprar nuevo
Comprar un coche nuevo tiene mucho sentido si te lo puedes permitir. Intenta ahorrar el mayor depósito que puedas permitirte. Pagarás menos en las cuotas mensuales y reducirás la duración del préstamo. La regla general en este caso es ceñirse al 10-20% de tus ingresos anuales. A los 20 años, esto puede limitar mucho tus opciones. Pero, si no te lo puedes permitir, no lo compres. No merece la pena. Asegúrate de que el plazo del préstamo no sea superior a tres años. Si es más, tendrás que pagar grandes cantidades de intereses.
Otras opciones de financiación
Si no puedes comprar un coche nuevo, busca en los concesionarios de coches usados. Lo más probable es que puedas conseguir una buena oferta en un coche usado. Además, es poco probable que necesites un coche lujoso y llamativo. Sólo necesitas algo pequeño y fiable, ¿no? Hay otras opciones de financiación disponibles. Entre ellas se encuentran los planes de alquiler con opción a compra y los planes de contrato personal. Asegúrate de saber en qué te metes con estos planes en particular. Pueden ser complejos y, en ambos casos, no eres dueño del coche hasta que devuelves cada céntimo. Por último, puedes considerar las opciones de leasing. Es una forma más barata de conducir, pero nunca serás dueño del coche.
También tienes que tener en cuenta los costes de funcionamiento en tus cálculos. Si vas a comprar un coche de segunda mano, esto es especialmente importante. Es posible que haya presupuestado el depósito y los pagos mensuales. Pero, ¿qué pasa con el combustible, el seguro, los impuestos y el mantenimiento? Mantén un presupuesto estricto y habrá un buen coche para los veinteañeros.