6 maneras de escapar de la rutina financiera
¿Alguna vez has sentido que, hagas lo que hagas, no puedes controlar tus finanzas? Puede ser increíblemente frustrante, cuando uno se esfuerza constantemente por mejorar sus hábitos de gasto, darse cuenta de que no está avanzando hacia sus objetivos. Sin embargo, la mayoría de nosotros entramos en un bache financiero en algún momento de nuestras vidas.
Tal vez dependas siempre de tus tarjetas de crédito porque te quedas sin efectivo demasiado pronto en el mes. Tal vez lleva años soñando con un objetivo de ahorro, pero nunca se ha acercado a él. Si estas cosas le suenan, las siguientes 6 estrategias podrían ayudarle.
1. Obtenga una nueva perspectiva
Tal vez te hayas pasado días mirando tu presupuesto, pero no se te ocurre cómo hacer las cosas mejor que ahora. El problema podría ser que simplemente estás demasiado cerca del problema. Pedir a un amigo o a un familiar que revise tu presupuesto y te dé su opinión puede ser una buena manera de salir de tu visión de túnel. Una nueva perspectiva es a veces todo lo que necesitamos para descubrir soluciones a problemas que nunca antes habíamos pensado.
Recuerda que debes evitar que tu presupuesto sea manejado por cualquier persona que consideres demasiado obstinada o dominante. Lo último que necesitas es que te hagan sentir culpable por tus decisiones financieras.
2. Utiliza más el efectivo que el plástico
Una de las mejores maneras de cambiar tus hábitos financieros es prestar más atención a cómo gastas tu dinero. A mucha gente le cuesta hacer un seguimiento de sus gastos cuando paga con una tarjeta de débito o de crédito. Es mucho más fácil mostrar un trozo de plástico que contar el dinero real de todo lo que se compra.
Cambiar tu estrategia para gastar en efectivo más a menudo y dejar el plástico en casa te obliga a adoptar un enfoque activo de tus finanzas. Al principio, organizar todo el efectivo te parecerá más un dolor de cabeza que una ayuda, pero cuando te acostumbres, empezarás a ver los beneficios.
3. Cambia tu rutina
Si alguna vez se ha propuesto un propósito de año nuevo, sabrá que los cambios importantes en el estilo de vida no son fáciles de hacer. Si quieres que tus estrategias sean duraderas, tienes que deshacerte de los malos hábitos e implantar otros nuevos. Este proceso comienza con la determinación de los aspectos que más perjudican a su situación financiera. Por ejemplo, ¿gasta constantemente dinero en almuerzos de trabajo cuando podría ahorrar dinero con un almuerzo para llevar?
¿Gasta una fortuna cada vez que ve una rebaja, aunque rara vez necesite los artículos que compra? Revise sus extractos bancarios más recientes y destaque cualquier cosa que pueda ser un factor desencadenante de un mal comportamiento financiero. Aunque al principio puede ser difícil aceptar tus defectos, es la única manera de hacer un cambio real.
4. Conseguir ayuda
Al igual que dejar de fumar o perder peso, un objetivo importante como el de cambiar los hábitos de gasto es algo que requiere mucho apoyo de las personas que te quieren y se preocupan por ti. Contar a tus amigos y familiares lo que estás haciendo puede facilitarte la vida. No sólo te da personas a las que rendir cuentas, sino que también significa que tendrás a alguien que te mantenga motivado cuando los tiempos se pongan difíciles.
Además, conseguir la ayuda de tus seres queridos también reducirá la posibilidad de que acabes diciendo «sí» cada vez que te inviten a salir a comer o a tomar un par de copas. Tus amigos sabrán que estás intentando ahorrar dinero, lo que significa que podrían cambiar una noche en la ciudad por un par de copas en casa, o una comida casera cuando quieran salir.
5. Piensa fuera de la caja
La elaboración de un presupuesto no tiene por qué consistir únicamente en reducir los gastos gastando menos en las cosas que le gustan. A veces, también puedes recortar los gastos de otras tarifas «esenciales» en tu vida. Por ejemplo, ¿puede comparar los precios de sus préstamos antes de pedirlos para asegurarse de obtener un mejor tipo de interés? ¿Tal vez incluso puedas consolidar algunas de tus deudas en un nuevo préstamo con mejores condiciones?
Si gastas una fortuna en cosas como la electricidad, ¿podría el cambio de proveedor ayudarte a ahorrar una cantidad significativa de dinero cada mes?
6. Manténgase fuerte
Por último, a veces intentar salir de un bache financiero no será fácil. Tendrás que mantenerte comprometido con tus objetivos y centrarte en la meta que quieres alcanzar. Aunque es muy probable que te caigas del vagón de vez en cuando, no te rindas. Levántate, recórrete y sigue intentando hacer cambios positivos.